JULIA MICHAELS Y BENJAMIN RICE ESCRIBEN SIETE CANCIONES ORIGINALES CON UNA BANDA SONORA CREADA POR EL COMPOSITOR DAVE METZGER EN HONOR A UN EXTENSO LEGADO DE CANCIONES MEMORABLES

LA NUEVA PELÍCULA DE WALT DISNEY ANIMATION STUDIOS QUE CELEBRA LOS 100 AÑOS DE DISNEY YA SE ENCUENTRA DISPONIBLE EN CINES

Ya se puede ver en cines WISH: El Poder de los Deseos, la nueva película animada de Walt Disney Animation Studios que se enmarca en las grandes celebraciones globales por los cien años de Disney.  La película está ambientada en el reino de Rosas, donde Asha, una ingeniosa soñadora, pide un deseo tan poderoso que es escuchado por una fuerza cósmica: una esfera de energía ilimitada llamada Estrella. Asha, Estrella y Valentino – la cabra favorita de Asha – se enfrentan al imponente Rey Magnífico para demostrar que cuando la voluntad de una persona valiente se une a la magia de las estrellas, pueden ocurrir cosas maravillosas.

Con siete canciones originales escritas por la cantautora Julia Michaels y el productor, músico y compositor Benjamin Rice, y una banda sonora compuesta por Dave Metzger, WISH: El Poder de los Deseos se inscribe dentro de una tradición inconfundible, al tiempo que inaugura una nueva forma de crear letras y melodías que quedarán para siempre en los corazones de las audiencias.

ROMPIENDO CON LA TRADICIÓN A PURO POP 

¿Cómo se crean canciones tan potentes, capaces de alojarse en la memoria de las audiencias junto a íconos como “Bajo el mar”, “Libre soy” o “Ciclo sin fin”? Indudablemente, el talento encargado de hacerlas juega un rol importantísimo. En el caso de WISH: El Poder de los Deseos, el equipo de Disney hizo una apuesta audaz y convocó a Michaels y Rice, dos mentes creativas que vienen del mundo del pop, rompiendo así con la tradición de contratar profesionales del mundo del teatro.

Con una trayectoria que incluye autoría de canciones para estrellas como Dua Lipa, Pink y Selena Gómez, Julia Michaels no solo tiene una fuerte impronta pop en su forma de componer, sino que además es la persona más joven en haber escrito todas las canciones de un largometraje de Disney Animation. Fanática de las canciones y las historias de Disney desde la infancia, Michaels a su vez tiene una relación de larga data con la compañía, ya que es la autora de la canción de la serie original de Disney Channel Austin & Ally. 

“Fue fascinante ver cómo trabajaban. Les mostrábamos cómo sería la narración hasta llegar a una canción, detalles del estado mental del personaje y todas las emociones relacionadas a ese momento. Anotaban todo y se iban por un rato, y luego volvían con una canción que no solo captaba lo que estábamos buscando, sino que a menudo le sumaba más elementos a la historia”, cuenta la codirectora Fawn Veerasunthorn. 

DESEOS, ANIMALES CANTANTES Y VERSOS ‘MAGNÍFICOS. 

Las canciones originales de WISH: El Poder de los Deseos son conmovedoras, pero cada una de ellas inspira a las audiencias de diferentes maneras. Acompañando la narración en distintos momentos de la historia, crean los climas más variados. Una de las canciones principales del film es “Mi deseo” interpretada por María León en su versión en español para Latinoamérica, quien también presta su voz a Asha. Comenta Michaels sobre la canción:

“Es un importante punto de inflexión en la historia del personaje. Es el momento en el que ella se da cuenta que no puede quedarse de brazos cruzados y dejar que una persona decida el destino de los sueños de todos los demás. Es una canción potente, fuerte. Tiene la fuerza que se debe tener si se quiere generar un cambio para el bien común”.

Otras de las canciones que componen el repertorio musical son “El Reino de Rosas”, una divertida, enérgica y auténtica ‘canción de bienvenida’ de Disney al estilo de “Finalmente y como nunca” de FROZEN: UNA AVENTURA CONGELADA, y “Sin dudar” que es una oda a los deseos del Reino de Rosas.

“Una estrella”, es una canción interpretada por 22 solistas que pone a cantar a los animales y las plantas del bosque, y es un guiño a Blanca Nieves y Aurora. Dice Michaels: “Asha comprende que todo está hecho de polvo interestelar. Es un momento tan divertido y bello, y siempre se me escapa una lágrima cuando la miro”.

“Queríamos una canción que representara la esencia de Estrella. Estrella está allí para recordarle a Asha que ella tiene el poder de hacer realidad sus sueños, y de que no está sola. La canción, y la película, es sobre la conexión con los demás y que, en el fondo, no somos tan diferentes”, agrega Fawn.

“¿Y así van a agradecer?”, una clásica canción de villanos que expresa los sentimientos más profundos de Magnífico; y “La ruin verdad”, Rice cuenta que adora esta canción “por la energía feroz que tiene y la confrontación con el poder que manifiesta” y destaca, “el puente de esta canción es uno de mis momentos musicales favoritos de la película, y sintetiza el viaje que fueron haciendo los adolescentes en su lucha por hacerle frente a Magnífico”. 

UNA BANDA SONORA CON SONIDO CONTEMPORÁNEO 

El compositor Dave Metzger da vida a la música incidental de la película, luego de trabajar en las bandas sonoras de FROZEN: UNA AVENTURA CONGELADA y FROZEN 2, y en la orquestación de otros títulos de Disney como MOANA: UN MAR DE AVENTURAS, RALPH EL DEMOLEDOR y TARZÁN.

“Con su música, Dave supo aprovechar hábilmente las sensibilidades modernas que Julia y Ben aportaron con las canciones. Creo que le encantó poder expandirse un poco en ese sentido, incorporando un sonido más contemporáneo a la tradición de Disney”, comenta el codirector Chris Buck. 

Fanático confeso de las películas de Disney, y fan #1 de LA BELLA Y LA BESTIA, Metzger describe la música del nuevo film como “clásica de Disney, con un giro moderno mezclado con un toque de sonidos mediterráneos”. Los sintetizadores, las guitarras y bajos eléctricos forman parte de la música, que a su vez incorporó los sonidos de guitarras clásicas e instrumentos de percusión que son comunes en la región mediterránea. Metzger también se valió de un oboe de amor, un oboe bajo, una flapamba (instrumento parecido a una marimba), un saxofón contrabajo y un dulcitone, que es un instrumento de teclado inusual que tiene diapasones en vez de cuerdas y sirvió como la “voz” de las burbujas de deseos.