Sinopsis: Finney, Ahora De 17 Años, Lucha Con Las Secuelas De Su Cautiverio Mientras Su Hermana Comienza A Recibir Llamadas En Sueños Desde El Teléfono Negro Y Visiones Inquietantes De Tres Chicos Acechados En Un Campamento De Invierno Llamado Alpine Lake.

La tan esperada segunda parte de esta película de terror, llega finalmente a nuestros cines y sorprende con una evolución, pues tiene una esencia completamente diferente siendo más brutal, sangrienta y violenta. 

En esta continuación los hermanos Finney y Gwen, ya adolescentes, tratan de continuar con sus vidas luchando cada uno con sus propios fantasmas, por su lado Finn, quien no ha podido superar los hechos que lo marcaron y Gwen, cuyas pesadillas son más intensas, siendo estas las que traigan nuevamente al Raptor pero esta vez en una forma más despiadada y demoniaca. 

Esta entrega tiene muchos puntos a favor, desde las magníficas actuaciones y química de los protagonistas: Mason Thames y Madeleine McGraw e incluso la del actor mexicano Demian Bichir, también parte importante de la historia; hasta la atmósfera de película de horror retro que maneja el director Scott Derrickson (Siniestro 2012, Líbranos del mal 2014).

Algo que causó incertidumbre desde el primer trailer, fue que en esta ocasión se situaban en un campamento lejos de aquella habitación en la que se desarrolló la primer parte, sin embargo, supieron trasladar la historia a un lugar completamente nuevo dándole un giro inesperado expandiendo el terror y convirtiendo a Gwen en la protagonista quien será la que tendrá que vencer al raptor. 

Otra cosa que no pasa desapercibida es la similitud que llega a tener con cintas como Pesadilla en Elm street, Viernes 13 y Carrie que marcaron a más de una generación y que posiblemente en unos años  Teléfono negro se convierta también en un clásico. 

Llena de sucesos paranormales y un misterio que poco a poco van resolviendo, es una película que se tiene que disfrutar en salas de cine y que sin duda no te puedes perder.