Matisse celebra éxito al doble en el Auditorio Nacional
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Matisse celebra éxito al doble en el Auditorio Nacional

  • La agrupación compuesta por Melissa, Pablo y Román honraron a pop mexicano con un show lleno de emociones a flor de piel
  • 2 Conciertos en el Auditorio con lleno total

Después de 9 años de trayectoria en la música pop, Matisse “cumplió su sueño” tras dar su primer concierto en el Auditorio Nacional ante 10 mil personas en Ciudad de México. Llevando consigo la esencia de Matisse, pues la banda se ha caracterizado por tener una gran diversidad de estilos mientras no pierden aquel sonido que los caracteriza; las melódicas voces de los tres hermanos donde en cada canción permiten que todos brillen sobre el resto por unas cuantas estrofas.

“Estamos deveras muy emocionados, es un sueño estar aquí. Solo podemos estar agradecidos, no cabe una sola persona, son lo máximo”, dijo Román.

Por otro lado, nos encontramos con un concierto que se delimitó en cada etapa no solo por el sonido, sino por las indicaciones que daba cada tanto tiempo alguno de los tres vocalistas o que podían leerse en las pantallas del escenario mientras Matisse salía al backstage para un muy corto receso o un cambio de ropa.

Así fue como se pasó de las canciones más bailables de la banda a una sección muy triste con canciones claves en su historia como “Todavía”, “Si fuera fácil” y entrañables covers que los han acompañado durante su renacimiento musical, como “Así era ella” o “Prometiste”.

Las 21 horas con 20 minutos, y la “hora del merequetengue” en el Auditorio, con la presencia del primer invitado de la noche, la Sonora Santanera, al ritmo de “Pedacito de mi vida”. Pero no podía faltar la participación del género que los hizo llevarse en 2022 su primer Grammy Latino; por esto fue que, con unas chamarras de mezclilla y flequillos plateados, junto a una banda nortena detrás cantaron “Te vale madre” y la joya de Grammy a Mejor Canción de Regional Mexicana, “Como lo hice yo”, las cuales Pablo y Melissa describieron como canciones de “cero terapia”.

El vocalista Pablo Preciado tocando el piano al centro del escenario, Román y Melissa sentados a un lado, para darle la bienvenida a “la zona sad”.

“Esa zona donde quieres marcarle a tu ex, te tiembla tu mano, y dices: "yo lo voy a cambiar. No lo van a cambiar jamás, así que abtenganse de hacerlo'” pedía Román.

Quizás uno de los momentos más impactantes para todos los presentes, incluidos Matisse, fue la llegada de Chuy Navarro, vocalista de Reik, minutos después de que el grupo hiciera un mashup con canciones como “Mientes” de Camila; “Sirena” de Sin Bandera o “Yo quisiera” de Reik. Y la banda no podía terminar su primera noche en el Auditorio Nacional sin sus éxitos “Primer avión”, “Más que amigos” y “La misma luna”.

“El camino de la música es difícil, pero a veces vale la pena por noches como esta”, se leía en el escenario, para dar fin al espectáculo de dos horas con 14 minutos.

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